FASCINACIóN ACERCA DE SALMO 91 REINA VALERA

No te gloríes en la desgracia de tu prójimo. Muchos se regocijan en los sufrimientos de los demás. Los que se regocijan en los sufrimientos de los otros están enfermos de la enfermedad del diablo; pero el Señor osado nuestras almas de esta enfermedad. No hemos de orar para que lluevan calamidades ni proponer con Clemente el agnóstico: «Dame

Incorporar los Salmos en tu rutina diaria puede ser tan simple como designar unos minutos cada mañana para adivinar uno o dos de ellos. Puedes leerlos en voz alta para reanimar sus palabras y conectar con sus mensajes más profundamente.Pero pase lo que pase, el único deseo que puede tener respecto a su causa es que perezca por completo. Y si se